Buenas (y malas) razones para tener un perro

Estas pensando en adquirir a un perro, sea bien adoptado o comprado? Mejor que leas esto primero así averiguas si tienes buenas o malas razones para tener un perro y si es una buena opción para ti y para tu familia.

Para compañía
Buena razón:
Los perros son animales sociales que adoran la compañía de su familia. Si tienes el tiempo para invertir en un perro, la recompensa es enorme. Pero si tu estilo de vida te obliga a que tu perro se quede solo durante largos períodos de tiempo, quizá un perro no sea la mejor opción para ti.

Coger un perro por impulso
Mala razón:
Evita la síndrome del “perrito en el escaparate con aire de pena” o del “perro abandonado que te mira con aire de suplica”: tener un perro es una decisión que cambia la vida y que no debe tomarse a la ligera. Evalúa bien todos los sacrificios que implica tener un perro (tiempo, cuidado, responsabilidad, dinero, etc.) y luego razona si estas dispuesto a embarcarte en este compromiso de por vida.

Estar en forma y conocer a gente
Buena razón:
Los perros pueden ser un puente para conocer a gente y a otros amantes de los animales ademas de ayudar a mantenerse en forma. Los perros necesitan ejercicio, caminar y salir muchas veces a la calle a hacer sus necesidades, lo que obliga a pasar bastante tiempo fuera de casa. Un perro puede ayudar a aumentar el contacto con el mundo exterior, a establecer vínculos sociales con otros dueños ademas de ayudar a mantener un estilo de vida saludable con largos paseos y ejercicio.

Para “hacerles cosas”
Mala razón:
Elegir a un perro para poderlo vestir, peinar, llevárselo en el bolso es una mala razón. Un perro no es un juguete, y tratarlo como un accesorio no es una buena razón para tenerlo.

Los niños pueden aprender mucho de un perro
Buena razón:
Los niños pueden aprender la compasión, la responsabilidad y la paciencia que conlleva tener y cuidar a una mascota. Los padres deben pero supervisar en cada momento todas las interacciones del niño con el animal, nunca dejarlos solos y asignar al pequeño las tareas de cuidado del perro apropiadas para su edad.

El niño quiere un perro por capricho
Mala razón:
Regalar un perro a un niño solo porque así “se calla y esta contento” o porque “esta en la lista de los Reyes” es una muy mala razón. Un perro significa responsabilidad y una inversión de tiempo y recursos para su cuidado. Ceder a un capricho del niño es un grave error. Mejor responsabilizar al niño introduciendolo al mundo del voluntariado en algún refugio local.

Un compañero para el otro perro de la familia
Buena razón:
Los perros son animales sociales que aman estar en contacto con otros de su especie; muchos perros aprecian la presencia de otro perro en la casa. Tener dos perros puede ser más fácil y más divertido que uno, sin embargo, cada perro es un individuo, y si no estas seguro de que perro es mas idóneo para tu actual perro, consulta a un profesional para obtener asesoramiento.

Un perro como regalo
Mala razón:
El compromiso de cuidar a un perro nunca puede ser para otra persona. No importa lo amables que sean tus intenciones, regala un perro solo después de haberte asegurado de que el regalo será bienvenido y que no solo la personas, sino todos los miembros de la familia con quien vive, están involucradas en el.

Estética del perro
Mala razón:
Si eliges al perro solo en función de la estética, porque “te gusta”, porque esta de moda o porque es el perro de los famosos, estas cometiendo un grave error. Cada raza o cruce tiene características peculiares que deberías averiguar antes de adquirir a un perro. No es lo mismo un perro de caza o un perro de compañia, un pastor alemán o un bichon maltés, un galgo o un mastín, un perro de agua o un bulldog ingles. Cada perro tiene necesidades físicas y mentales distintas e ignorar este aspecto puede provocar con el tiempo frustración del perro y sufrimiento del dueño. Pide asesoramiento antes de comprar o adoptar a un perro así estarás mas seguro de la elección correcta.